La Selección Colombia logró un importante triunfo
en Chile de visitante, ahora es segundo en la tabla de clasificación y puso a
soñar de nuevo a todo un país con volver a un mundial.
Por Diego Suárez
difersuca@hotmail.com @diegosuarezcano
De nuevo la ‘Tricolor’ nos
brindó una alegría inmensa, una satisfacción única y una nueva ilusión a todos
los colombianos con el triunfo de ayer ante Chile, uno de los mejores equipos
de la eliminatoria.
Fue muy gratificante ver que todos los
noticieros tanto radiales, televisivos, digitales y la prensa escrita
‘abrieran’ y en primera página con el triunfo de nuestra Selección Colombia; y
es que no era para menos porque el seleccionado nacional jugó uno de los
mejores partidos de los últimos años, jugó organizado, goleó de nuevo, esta vez
de visitante y con el triunfo las posibilidades de ir al mundial hoy más que
nunca están más cerca.
Sin duda alguna el tema de moda es
la Selección Colombia, por las calles, en los buses, en los restaurantes y
hasta en los pasillos de las oficinas se habla de fútbol, de los goles que
anotó James, Teófilo y Falcao, y del técnico Pékerman que nos puso a soñar de
nuevo. Y es que afortunada e
infortunadamente el deporte se ha convertido últimamente en el único tema que
nos brinda noticias positivas y alegres, en un país donde estamos acostumbrados
a ‘consumir información’ relacionada con violencia y corrupción.
Cambio de mentalidad
Este cambio es una de las grandes
virtudes que tiene la Selección Colombia, encabezada por el profesor Pékerman;
es un equipo ofensivo y no defensivo como veníamos acostumbrados a ver y los
jugadores son conscientes que hay que salir a atacar, a presionar el rival y no
a defenderse como lo hacían anteriormente. Otra clave del éxito es la
continuidad que se le dio al mismo grupo de jugadores que enfrentó a Uruguay
con el sistema 4-2-2-2. Otro valor agregado de la era Pékerman es que volvimos
al toque toque, al juego práctico, a un solo toque, máximo dos.
Los
protagonistas
El equipo en general jugó bien,
sería injusto nombrar a unos y a otros no, como diría mi papá “estaban todos
enchufados”, y sobre todo, comprometidos con el equipo y con todo un país,
cumpliendo las órdenes al pie de la letra del estratega, José Néstor Pékerman,
para mí, la gran figura de esta fase de las eliminatorias.
El técnico argentino fue el héroe de
esta jornada y aunque muchos no creíamos en él, planteó un buen partido, hizo
los cambios correctos y en el momento preciso para remontar el marcador cuando
Chile nos ganaba por la mínima diferencia.
Pékerman se salió con la suya y
nos calló la boca a varios que no dábamos un peso por él; por ese ‘viejito
chocho’ y misterioso que no da declaraciones a la prensa, el que no deja
ingresar periodistas a los entrenamientos de la Selección Colombia, el que
entrega la alineación un día antes o el mismo día del partido, y el mismo que
tiene nueve asistentes técnicos con los que anda para arriba y para abajo, nos
dio una enseñanza, una nueva alegría y nos tiene soñando con la clasificación
al Mundial de Brasil 2014. Como dicen por ahí en broma “si llegan a ver a Pékerman
pegándole a la moza, ¡coman callados!”.
