miércoles, 22 de febrero de 2012

Ser futbolista, sueño de muchos


El fútbol a mis 7 años, era un juego, a mis 14, una diversión y a mis 20 mi pasión.
Anónimo
Por: Diego Suárez 
difersuca@gmail.com - @diegosuarezcano


Fotografía:www.123rf.com 

De nuevo dedico un tiempo para escribir en este espacio acerca de un tema que me apasiona, el fútbol. Quiero aclarar que este no es un artículo investigativo, ni mucho menos, sino de experiencias que he vivido en carne propia.

El deporte más sencillo y económico es el fútbol, en cualquier calle, terreno o potrero en el peor de los casos se puede jugar. Porque un gordo y un flaco; un ‘calidoso’ o un ‘tronco’ siempre tienen puesto en el equipo. De día, de noche, en las mañanas o en las tardes, a cualquier hora, el fútbol nunca será un mal plan. ¿Quién no ha jugado fútbol alguna vez en su vida?

Para muchos niños y jóvenes uno de sus sueños es precisamente ese, ser futbolista profesional. No es raro encontrar esta idea en común en los muchachos de edades entre los   10 a 18 años. Yo   alguna vez tuve la ilusión de pertenecer a un equipo profesional, ser parte de la Selección Colombia, jugar un mundial y levantar una copa mundo.  Es el sueño de muchos niños que jugaron a ser Maradona, Ronaldinho o Ronaldo, o en muchos casos un Oliver Atom o un Steve Hyuga, figuras de la serie animada Súper Campeones. En lo personal creería que muchos alguna vez soñamos esto.

De aquellos soñadores, la gran mayoría hicieron parte de las famosas escuelas de fútbol de barrio, algunos pertenecieron al equipo del club al cual están afiliados sus padres, otros con un poco más de condiciones y talento para el balompié, alcanzaron jugar intercolegiados o interuniversidades, pero son pocos los que logran llegar allá, al profesionalismo y hacer parte de un club profesional.  Y es que no solamente los que tienen condiciones y talento llegan a ser profesionales, en mi opinión se necesitan contar con otros factores para hacer realidad ese sueño, y los he definido así: talento, disciplina, verraquera , un padrino o una palanca.  

Talento:
El talento va de la mano con la llamada ‘calidad’, ese jugador que sabe correr la cancha, que tiene una buena fundamentación, que le pega bien al balón, aquél que adorna la jugada con un taco, o una buena finta, entre otras cosas.  

Disciplina
Son pocos los jugadores que cumplen con este requisito, que a mi consideración es el más importante para llegar lejos en cualquier deporte. Es aquél jugador que cumple unas normas previamente establecidas para un grupo, el que se cuida con las comidas, con las bebidas y las trasnochadas; infortunadamente en Colombia no tenemos esa cultura y esa disciplina, “somos muy folclóricos” dicen los abuelos.

Verraquera
Este es el punto que creo que es en el que más fallamos los colombianos. Aquí son muy pocos los jugadores que sienten la camiseta, que la ‘sudan’, que se entregan hasta el último momento del partido, que juegan con hambre, con actitud, con pasión por el balompié, o como algunos dicen le ponen ‘güevas’.  

Padrino o palanca
Infortunadamente el talento y las capacidades a veces no son suficientes para ocupar un cargo o ejercer una profesión, siempre hace falta ese empujoncito que llamamos palanca, padrino o rosca; esa que lo ubica en un muy buen puesto sin ser el mejor o el apropiado para desarrollarlo. En el fútbol es muy común ver este tipo de casos, cuántos jugadores están en muy buenos clubes, ganando muy buen dinero y a veces en la nómina titular por encima de otros que tienen mejores condiciones.

Lo anterior no quiere decir que los jugadores profesionales cumplen con todas esas características, lo ideal sería que tuvieran de todas un poco, lo que yo llamaría un ‘jugador integro’. En nuestro país hay muchos jóvenes que juegan bien al fútbol, en este caso tienen el talento, pero les gusta el ‘traguito’, la rumba y la trasnochada, no cumplen con la disciplina; otros que le ponen ganas, fuerza y verraquera, pero les falta calidad y técnica; el fútbol es más que fuerza, o lo más difícil no cuentan con un padrino o una buena palanca que los promocione o patrocine en un club profesional. Otra cosa, es muy diferente cuando nacen esos genios o artistas, que a propósito son muy pocos en el mundo, que no necesitan tener esas características porque son jugadores innatos que se salen de lo normal, que marcan la diferencia; me refiero a figuras como Maradona, Pelé, ‘El Pibe’, o en la actualidad un Cristiano Ronaldo, un Neymar o el mejor del momento Messi.

Si usted algún día tuvo el sueño como yo de ser jugador profesional y no le alcanzó, lo invito para que analice ¿qué tenía? y ¿qué le faltó? para hacer realidad ese sueño. En mi caso, faltó un poco más de disciplina ¿y a usted?

Lo invitamos para que comente este artículo y lo comparta con sus amigos a través de las redes sociales. Si tiene algún comentario o quiere generar un debate sano sobre el contenido del artículo, también puede hacerlo. Escríbanos a laotracaradelfutbol10@gmail.com 

¡Gracias por visitarnos!
LA OTRA CARA DEL FÚTBOL.

3 comentarios:

  1. Hola Excelente articulo!!! Con respecto a la pregunta ¿Quién no ha jugado fútbol alguna vez en su vida?...creo que uno de los que nunca jugó futbol ni en el recreo del colegio, fue nuestro queridisimo Ivan Mejia.

    ResponderEliminar
  2. Mejía ni arquero. jajajajaja

    Y bueno varios de la vieja guardia. Y de los de la nueva guardia parecen que hayan jugado pero creen que son mejores que los mismos que juegan.

    Estamos mal.

    ResponderEliminar
  3. no solo falta eso , en mi caso yo era habilidoso , disciplinado u bien verracudo como tu dices pero lamentablemente naci con un problema en la columna que de adulto empezo a molestar y cada vez se hizo peor ...ya no puedo jugar futbol .... ni con los amigos ...

    ResponderEliminar